Etapa 3: Cieza - Fuente Álamo.

6 de Agosto de 2024.

Etapa 3: Cieza - Fuente Álamo.

Distancia:70,26 Km.
Desnivel acumulado:858 m.
Hora de Salida: 5:25 h.
Hora de Llegada: 11:17 h.
Tiempo empleado: 5 horas 59 minutos, (tiempo en Wikiloc).


        
Totalmente de noche a la salida de Cieza.

        A las cinco de la mañana me despierto, dando inicio al día. Lo primero es un poco de aseo y el desayuno: un café con cruasanes y algo de fruta que compré ayer. Al terminar, me pongo la ropa de ciclista y, con rapidez, recojo mis pertenencias, asegurándome de no olvidar nada mientras guardo todo en las alforjas.

Monumento a la Semana Santa.

        Bajo a la calle, dejo las llaves en el buzón y cierro la puerta del portal, consciente de que ya no hay vuelta atrás. Son las cinco y media cuando comienzo a dirigirme hacia el punto de partida de la ruta, a pocos metros de aquí, en la plaza de la biblioteca. Allí, una inscripción en grandes letras reza: "Érase una vez...", un homenaje al inicio de los cuentos infantiles.

Es plena noche, y al salir de Cieza quedo envuelto en la oscuridad. Solo mi potente foco ilumina el camino; sin él, estas salidas nocturnas serían imposibles.

Inicio de la Vía Verde del Chicharra.

        Tras abandonar las calles, sigo por una carretera con algo de tráfico, tomando las precauciones necesarias y luego por un polígono industrial, todavía mudo por las horas que son, más adelante entro en un camino asfaltado que serpentea entre casas cuyos muros delimitan sus parcelas, cuando éstas desaparecen también el asfalto con ellas dando paso a un sendero de tierra compactada, estoy en la Vía Verde del Chicharra, un antiguo trazado ferroviario que existió hace mucho tiempo.

        Cruzo un puente sin ver el arroyo que salva, después de de tres kilómetros de vía verde la dejo, para seguir por un camino rodeado de campos de cultivo, no logro saber de que tipo de frutales son, éstos están vallados y no distingo de que tipo se trata.

El perfil de las montañas al amanecer.

        Por el camino que transito existen flechas que indican que es el camino de Caravaca y de la conexión de Cieza con Yecla.

        Los árboles frutales desaparecen y dan paso a las vides, extensos viñedos se extienden de un lado para el otro.

Señalización del camino de Caravaca y pequeños recorridos.

        La señalización no la pierdo, en cada cruce existe una flecha, pero llega un momento que ya no las veo, confiando en el track que tracé en casa, voy avanzando, pero llego a un punto en que me encuentro con una nave industrial y dos puertas que se supone que tenía que atravesar, una de entrada y la otra de salida.

Área de descanso y señalización de la vía.

        Esto hace que tenga que buscar una alternativa, por lo que sigo los caminos del mapa, intento no salir a la carretera, los caminos que aparecen como alternativa desembocan en la carretera, cosa que no quiero, por lo que voy un poco hacia atrás para intentar retomar mi trazado.

Viñedo con la Sierra Larga al fondo.

       A la vista tengo el camino que tengo que coger, pero el camino por el que voy no enlaza, sino, que va paralelo por el que estoy pero con un pequeño canal de regadío, por lo que tengo que coger la bici a pulso, siempre con una rueda apoyada en el suelo, para cruzarla, por lo que estoy enfilado y retomo de nuevo mi track preparado, dirección Jumilla.

        Famosa por sus vinos con Denominación de Origen, Jumilla se sitúa en el Altiplano de la Región de Murcia, donde las tierras del litoral dan paso a las llanuras manchegas.

Plaza de Arriba en Jumilla.

    

Iglesia de Santiago en Jumilla.

       Doy una vuelta alrededor de la iglesia de Santiago, sin muchas expectativas de encontrarla abierta, como efectivamente es el caso, así que decido continuar mi salida del pueblo, al llegar al último tramo de la calle, me encuentro con unos escalones, por lo que no tengo más opción que bajarme de la bici para descender las escaleras, haciendo inevitablemente ruido con las calas de mis zapatillas y el golpeteo de la bicicleta, así que no es de extrañar cara de sorpresa de una vecina, que probablemente acostumbrada a la calma del lugar, me mirara extrañada al ver a un ciclista atravesar esa calle donde quizás no es habitual ver ciclistas.

    Salgo de la ciudad, dejando atrás el castillo que domina la colina, tomo un camino de tierra hasta encontrar la carretera RM403, que recorreré durante 8 kilómetros hasta que llego a un cruce con varias señales que indican distintos puntos de interés, entre ellos la Cañada Real, por donde continuaré hoy hacia mi destino.

Paneles informativos en La Cañada Real.

       

        Aunque he dejado el asfalto, el camino sigue en paralelo a la carretera hasta que no tengo más opción que reincorporarme brevemente, esta vez, solo será por un kilómetro y medio, después de lo cual abandonaré el asfalto definitivamente. Ya llevo recorridos 52 kilómetros.

        Un cartel desvencijado y casi ilegible por el paso del tiempo me indica que estoy de nuevo en La Cañada, el camino de tierra está en buen estado y, aunque va ganando altitud de manera gradual, es rápido. No será mucho, ya que el desnivel total de la etapa de hoy es de 858 metros.

El asfalto en la Cañada Real de Albacete a Murcia.

        Más adelante, el camino de tierra se convierte en una vía asfaltada, aunque no deja de ser un simple camino, únicamente tiene una delgada capa de asfalto sobre la tierra, pero sigue siendo mejor que el terreno anterior.

Cortijo en ruinas en la Cañada Real de Murcia a Albacete.

        En mi solitario camino, solo me adelanta un coche ya entrado en años, adecuado para este tipo de pistas. La sombra del asfalto desaparece y continúo rodando por el camino de tierra, salpicado por algunos cruces señalizados con indicaciones de los actuales o antiguos moradores de los cortijos que se dispersan por el paisaje: Casa del Gaitán, Casa de José, así como también algunos cortijos abandonados y en ruinas.


        El terreno es árido, pero está salpicado de viñedos, gracias a las lagunas artificiales que permiten regar estas tierras de secano.

       En el kilómetro 61, me encuentro con un yacimiento arqueológico, los restos de unos antiguos hornos de yeso, cuyo origen histórico es difícil de precisar.

Ancestrales hornos de yeso de Los Llanos.

        Un poco más adelante, encuentro un área de descanso abrasada por el sol, con tres paneles informativos ilegibles y una señal que indica un camino hacia la cima de un cerro, flanqueado por molinos de viento. Allí se encuentran las ruinas de la ermita de Los Almendros, que puedo ver destacando en lo alto. Sin embargo, mi camino la deja a la izquierda, olvidándola por completo.

Ermita de los Almendros, todavía en la provincia de Murcia.

        Ahora toca ascender un poco para cruzar el altiplano que separa las provincias de Murcia y Castilla-La Mancha, donde se ubican los parques eólicos de Los Almendros I y II, quedan ya poco más de dos kilómetros hasta Fiente Álamo, miro el reloj y la verdad es que es bastante pronto, son las Diez y media de la mañana, cinco horas de ruta, que salvo el fresco del amanecer, han estado marcadas por un sol cegador y un calor sofocante.

       Llegando a Fuente Álamo, sigo por un camino salpicado de pequeños viñedos y olivos, entro al pueblo por la parte alta hasta llegar a la plaza, donde algunos vecinos están en la terraza de un bar, cómodamente resguardados a la sombra, buena elección. 

Iglesia San Dionisio Areopagita, Pl. España, Fuente-Álamo, (Albacete).

        Localizo mi alojamiento, justo en el centro del pueblo. Son las once y veinte de la mañana, llamo al timbre con cierta incertidumbre pensando que quizá la habitación aún no esté lista, y tenga que esperar ahora que el sol empieza a ser sofocante.

        Para mi sorpresa, la misma chica que estaba terminando de preparar la habitación es quien registra mi entrada, esta noche la pasaré en el Hotel de dos estrellas que se llama "Hostal Central", justo en la plaza de España, en el centro de Fuente-Álamo.

        Un buen alojamiento, cuenta con una cocina común con frigorífico, microondas, cafetera y tostadora y todo lo que necesitas para desayunar.

Vista desde eel Hotel de la Plaza de España de Fuente-Álamo, (Albacete).

        Una vez de haberme instalado, con la ropa tendida y yo aseado, me dispongo a comer, me comeré en bocadillo que me hice ayer ya que no he parado a almorzar, así que entro en el bar Rolix, enfrente del Hostal y en el interior me lo como, disfrutando del fresco del aire acondicionado y acompañado de una cerveza bien fría... o quizá dos.

        Hacia las tres de la tarde fui a comer al restaurante "Mesón El Álamo", menú bastante bien y bueno, je je, o será el hambre que se hace al hacer ejercicio moviendo las piernas.

Mandalas haciendo sombra en una calle de Fuente-Álamo.

        Entre la siesta, ver los deportes Olímpicos, el vídeo y preparar baterías para mañana va cayendo, la tarde, el sol sigue fuerte, pero me doy una vuelta por la localidad, también compro algo para hacerme un bocadillo para la cena y aunque el desayuno está incluido, aprovecho para comprar un poco más.

Ayuntamiento de Fuente-Álamo (Albacete).

        Ya cayendo el día, preparo las alforjas y la ropa de ciclismo para tener que hacer los mínimos movimientos en la madrugada antes de abandonar la habitación.

        Un día de calor como cabía esperar, y un pequeño lío que tuve antes de llegar a Jumilla, por culpa de una zona donde había una nave cobertizo que estaba con una puerta cerrada, que me hubiera permitido continuar por mi camino sin ese rodeo que me tocó hacer.

        Un saludo y hasta mañana.



Etapa 2: Murcia - Cieza.

5 de agosto de 2024.

Etapa 2: Murcia - Cieza.

Distancia: 68 Km.
Desnivel acumulado: 573 m.
Hora de Salida: 6:25 h.
Hora de Llegada: 13:10 h.
Tiempo empleado: 5 horas 39 minutos, (tiempo en Wikiloc).


Ruta marcada por el rio Segura.


        Son las cinco de la mañana y me despierto ya con las ganas de empezar este día, aunque es totalmente de noche, así que después de asearme me dedico a desayunar, un café frio con algo de bollería, también un poco de fruta.

        Todo está ya metido en las alforjas y así bajo hasta el hall de la entrada y me despido del recepcionista del hotel, aparcado en la puerta del mismo hago la primera foto del día, más bien de la noche, me dirijo primeramente hasta la plaza de la Catedral que está aquí cerca y que hago que sea el inicio de la etapa en el día de hoy.

Catedral de Murcia.


        La ruta comienza remontando el Rio Segura por el corredor fluvial que va desde Murcia a Contraparada, es una especie de carril bici y camino que va paralelo del rio y que en un principio esta iluminado con farolas hasta que éstas desaparecen y voy pendiente de la iluminación de mi potente foco.

Cauce del Rio Segura.

        El desnivel es casi inexistente, si que es en ligera pendiente cuesta arriba pero apenas se nota, me voy alejando de la ciudad y poco a poco las construcciones de la ciudad dan paso a pequeñas huertas.

        El rodar se hace amable y así va amaneciendo, la ruta transcurre por el margen izquierdo del rio, al otro lado también existe otro camino paralelo al rio, se pasan por unos cuantos puentes que sirven de paso de una a la otra orilla del río.

        A los doce kilómetros el camino llega a la Contraparada, que es una especie de presa que regula el agua para la huerta murciana, y que hace una especie de soto, el cual se puede rodear por un camino existente, cosa que realizo haciendo un rodeo que completa el circulo del soto.

Presa de Contraparada en el rio Segura.

        Uno de los puentes que destaca es el puente rojo, un antiguo puente del ferrocarril que se encuentra bien conservado y que da acceso a la vía verde del noreste. Cerca de allí, se extiende un amplio campo de sandías, ya recolectadas, donde solo quedan algunos ejemplares desechados por las máquinas cosechadoras, ya que estaban demasiado verdes o fuera del alcance de la maquinaria, aunque  parece que esos pocos ejemplares han madurado con el paso del tiempo, sólo lo puedo comprobar porque hay algún ejemplar recién abierto con la carne bien roja.


Puente del ferrocarril, hoy vía verde.

        El camino sigue siendo una ciclovía con una parte de tierra y otra de asfalto hasta que este desaparece y se convierte todo el en camino de tierra compacta y en buen estado.

        No será hasta aproximadamente el kilómetro 36, que crucemos el rio por un puente por una zona de descanso a la altura de los municipios de La Algaida y Archena.

        La ruta por Archena es por un parque por la ribera del rio, desde el puente de hierro hasta la inmediaciones del balneario pasando por el museo de Archena.

        Antes de llegar al balneario se pasa por una playa fluvial, en la que ya estaban los chicos del lugar dándose un baño, aunque sean las Diez de la mañana, ganas no me faltaron ya que el sol y el calor ya se empiezan a notar.

Paseo de Archena con un monolito bañado con las aguas termales del Balneario.


        La ruta entra pasa por el balneario de Archena, e
l Balneario de Archena es un complejo termal de más de 200.000 m², situado en la provincia de Murcia, en el Paraje Natural de Valle de Ricote, junto al río Segura.

Balneario de Archena.


        Dejando el Balneario atrás y a cinco kilómetros se llega a la localidad de Villanueva del Rio Segura, las once de la mañana, hora de reponer fuerzas, me dirijo a la única tienda de esta pequeña localidad, y me dispongo a comer en la plaza de la Iglesia.

Iglesia de la Asunción en Villanueva del Rio Segura.

        Continuo la ruta volviendo a salir del centro de Villanueva bajando hasta el puente que cruza el rio Seguro, a poca distancia se encuentra la localidad Ulea 
perteneciente a la comarca del Valle de Ricote.

Vista desde el mirador del Salto de la Novia.


        A la salida de esta última localidad, se encuentra el mirador del Salto de la Novia, que ofrece vistas impresionantes. Continúo por una carretera que, en realidad, es más un camino asfaltado, ya que su firmeza y anchura no son las adecuadas para una vía principal.

Tras cruzar nuevamente el río Segura por un largo puente colgante, circulamos por la carretera MU-522, pasando por la localidad de Ojós, en este punto, me desvío de la carretera para visitar el lavadero.

Al igual que en otras localidades, este lugar ha sido escenario de generaciones de mujeres que se reunían para realizar sus labores diarias en una época en la que el lavado de ropa se hacía a mano, aprovechando el cauce fluvial de los ríos cercanos.

Recién restaurado lavadero de Ojós.

        Sigo por un camino estrecho hasta volver a salir a la carretera, que me lleva a la parte alta del cañón formado por la sierra del Salitre y la sierra del Chinte, ahora Comienza un descenso, y las ganas de sentir la bajada hacen que me pase el cruce que debía tomar, así que tuve que retroceder sobre mis pasos para cruzar la presa que forma el embalse de Ojós.
        
Embalse de Ojós.

        paso por encima de la presa y en la otra orilla se pasa por un túnel para dar continuidad a una carretera secundaria que me lleva a lo largo del embalse, a la altura de la localidad de Bayna el trazado abandona el asfalto para acercarse a la orilla del embalse a través de un parque.

Embalse de Ojós.

        Después de esta incursión la ruta vuelve al asfalto para llegar a la localidad de Blanca, aquí entro en un mirador en el que se puede observar todo el embalse y el paisaje que lo rodea. Es un lugar es bucólico para tener una vista panorámica y espectacular del corazón del valle de Ricote.

        Con Blanca a un lado y el embalse del Azud de Ojós a otro el mirador es uno de los mejores puntos para contemplar ambos lugares.

Vistas desde el mirador Alto de Bayna.

        Después de disfrutar de las imponentes vistas es momento de continuar, ya dejamos a parte el asfalto y la ruta transcurre por estrechas calles, inclusive escalones, en la localidad de Blanca, volvemos a cruzar el Segura para continuar por un zigzag de camino rodeado de limoneros.

        Para llegar a Abarán me encuentro con un  problema, el camino es una senda y según  el mapa continua hasta la localidad, pero se me pierde a la altura de un caserío en ruinas y me quedo bloqueado, tengo que echar un poco para atrás para rodear este caserío para salir al otro lado del mismo, cogiendo de nuevo la senda, la cual tiene las indicaciones de recorrido, aunque su trazado está bastante deteriorado.

Tramo complicado en Abarán.


        Una vez que he logrado de salir del tramo cortado, volvemos a estar cerca de la orilla del rio, a la altura de Blanca en el rio hay una presa que es aprovechada para ser una zona de baño y para hacer un descenso en canoa por la presa, organizada por alguna empresa de ocio, me quedé un poco esperando cómo bajaban por la pared de la presa con los chicos montados en ella.

Deportes acuáticos en la presa de Abarán.

        En este momento recibo una llamada de teléfono, es la dueña del alojamiento de Cieza, interesándose por la hora de mi llegada a su establecimiento, la verdad es que no tenía ni idea del tiempo que me podía costar, así que le dije mi ubicación y que ella calculara la distancia.

        Quedan unos seis kilómetros para llegar a Cieza, pero esta parte transcurre por un camino marcado que se iba estrechando convirtiéndose en una senda irregular justo en la orilla del rio.

Senda peligrosa a orillas del Segura, a 6 Km de Cieza.

        A la una y media de la tarde llego a la puerta de alojamiento, se trata de un aojamiento turístico que se llama La Casa del Sol, s
e trata de un piso con varias habitaciones, baño compartido y una cocina totalmente equipada, además, cuenta con terraza, lavadora y secadora a disposición de los huéspedes, todo esto, sumado a la amabilidad de la dueña que hace la estancia aún más agradable.

    
Casa donde me alojé en Cieza.

        La dueña del piso me recibió de manera muy amable y tras indicarme dónde se encontraba mi habitación, me comentó algunos lugares para comer y, además, me recomendó una excelente heladería, después de despedirse aproveché para asearme y poner una lavadora con mi ropa, la cual tendí en el patio donde también dejé estacionada la bicicleta.

Habitación donde me alojé en Cieza.
  
       Con algo más de tiempo, fui al restaurante que me había sugerido y, tras una buena comida, disfruté de una siesta reparadora, después, di un paseo por Cieza visitando algunas de sus plazas y avenidas.

Monumento a la agricultura, en Cieza.

        Al ser una ciudad de tamaño considerable, encontré un supermercado donde me aprovisioné para la cena y el desayuno, algo que he estado haciendo últimamente. Finalmente, regresé a la habitación para preparar el video y tomar unas notas rápidas sobre la etapa del día.

Monumento a la madre en Cieza.

Plaza de España y plaza de abastos de Cieza.


        Una etapa en la que el río Segura nos acompaña de principio a fin, convirtiendo el recorrido en una bonita y verde etapa, prácticamente sin desniveles. Es un trayecto muy cómodo, ideal para disfrutar del paisaje, transcurriendo casi en su totalidad por caminos y ciclovías. Solo se presentan un par de tramos complicados: la llegada a la localidad de Abarán con y una senda junto al Segura, donde es necesario tener algo de precaución al circular cerca de la orilla del río.



Etapa 1: Cartagena - Murcia.

4 de Agosto de 2024.

Etapa 1: Cartagena - Murcia.

Distancia: 64 Km.
Desnivel acumulado: 666 m.
Hora de Salida: 7:52 h.
Hora de Llegada: 13:10 h.
Tiempo empleado: 5 horas 17 minutos (tiempo en Wikiloc).



Estatua de Santiago en el puerto de Cartagena.


         Son las siete de la mañana, la hora en que abre el restaurante del hotel para el desayuno. Así que me aseo rápidamente y bajo a la entreplanta, donde hay un pequeño buffet libre para coger las fuerzas necesarias para la la primera etapa de esta gran ruta.

        La primera etapa la hice a propósito más o menos corta, para tener al menos un primer contacto y comenzar a acostumbrarme a la ruta, por eso, elegí un trayecto que no es muy largo y con poco desnivel, que era mi objetivo principal en esta etapa inicial.

Las 8:00 a.m., todo preparado para el inicio.

        
Las primeras pedaladas son para ir activando las piernas poco a poco, desde el hotel desciendo hacia el puerto de Cartagena. En los mapas, había visto que en un punto se encuentra el monumento al apóstol Santiago, así que me dirijo hacia allí.

        
Cruz de Santiago y Mural representativo.

        La imagen del Apóstol Santiago, está acompañada de una cruz de más de quince metros de altura, que ha sido diseñada por Andrés Martínez y construida en los talleres de Tamar.

        Se encuentra junto al mural que representa la entrada del Apóstol en España, por el barrio de pescadores.

        Inmortalizo el inicio de la etapa con el monumento al Apóstol y después me dirijo hacia la plaza del ayuntamiento para ir enfilando el inicio de la ruta.

        Paso por la Calle Mayor y, tras cruzar la Plaza de España, continúo recto por una calle que cambia de nombre a medida que avanzo: Calle San Antón, Calle Colón, Juan Carlos I, entre otras, así, entre  edificios, alcanzo la entrada de la Vía Verde del Campo de Cartagena, que se encuentra a unos 9 km aproximadamente.

        Esta Vía verde sólo la transitaré en sus primeros tres kilómetros desde el Barrio de Dolores, para abandonar definitivamente a la ciudad de Cartagena y pasar por un paso inferior de la autopista AP-7.

Vía Verde del Campo de Cartagena.

        Se nota que es Domingo ya que me alcanzan o me encuentro de frente con grupos de ciclistas, todos ellos con bicicletas de carretera o Gravel, los caminos son de tierra compactadas del tipo de concentración parcelaria, que luego se convierten en caminos asfaltados.

        Una vez que se pasa por debajo de la autopista el recorrido transcurre por caminos que van paralelos a canales de riego, una vieja noria recuerda que estamos en campos y tierras fértiles dedicadas al cultivo de frutales y otros frutos del campo.

        El camino asfaltado no tiene apenas desnivel, por lo que el rodar se hace muy agradable, rodeado de campos que están ya recolectados, en algún lugar observo que han sido melonares, ya que queda alguno sin recoger, me paro y cojo uno mas desechado por su pequeño tamaño, como la cabeza de un niño recién nacido, éste lo meto en las alforjas quizá por llevarme un recuerdo de estos campos.

Noria de filtraje de agua, en los campos de Cartagena.


        Durante unos cuatro kilómetros voy paralelo a un canal de riego que es coincidente con el GR-250, abandono este canal desviándome a la izquierda, a pocos metros me encuentro con la primera población cuyo nombre es Jimenado.

        El Jimenado es una pedanía del municipio de Torre Pacheco, dedicado casi exclusivamente al cultivo extensivo de la zona.

        Pasaré también por el municipio de Los Martinez del Puerto, también situado en el llamado Campo de Murcia, perteneciendo a la comarca natural del Campo de Cartagena.

Nuestra Sra. de las Maravillas en  municipio de Los Martinez del Puerto.


        A la salida del municipio de Los Martínez del Puerto el camino sigue asfaltado y en buenas condiciones, es entonces cuando encuentro las primeras señales del Camino de Caravaca y una flecha del Camino de Santiago. 

        A dos kilómetros y medio abandono la comodidad del asfalto para ir por un camino bastante desdibujado que se confunde con las tierras de cultivo, con tramos bastante deteriorados cubierto de polvo y con signos de haber sido arrasado por el agua en días o meses anteriores.

        Son los parajes de la Vereda de Torre Pacheco, esta primera parte culmina atravesando la autovía RM-19, autovía del Mar Menor, en este punto pasaré por unos pabellones de algún polígono industrial cercano.
    
        Un nuevo giro a la izquierda me lleva a enfrentar una cuesta bastante pronunciada, este paisaje de estas zonas es conocida como badlands, que se caracteriza por sus empinadas pendientes, la tierra es suelta y arcillosa, y aunque es posible transitar por aquí el camino esta bastante roto, lo que hace que en alguna ocasión haya que empujar la bici, no sin dificultad al tener que sortear algún escalón esculpido por el correr del agua.

Ruinas de la ermita de Lo Parejo.


        El camino es árido, casi desértico, y en el horizonte se vislumbran unas ruinas: las de la ermita de Lo Parejo. En este paisaje desolado, continúo avanzando y, a pocos metros, encuentro otras ruinas, que corresponden al antiguo caserío de Lo Parejo.

        Estoy recorriendo una zona llana, atravesando lo que parece haber sido un antiguo lugar de descanso. A medida que me acerco a la autovía de Murcia A-30, el camino se convierte en asfalto y  sigue paralelo a la autopista, pasando por detrás de la venta del Puerto de La Cadena.

        El camino asfaltado desciende hasta una especie de entrada, que marca el inicio al Parque Natural El Valle y Carrascoy.

Entrada al Parque Natural el Valle y Carrascoy.

        A partir de este punto, nos adentramos en el parque, rodeados de pinares de pino carrasco y pino piñonero, junto con pequeños enclaves de encinas o carrascas, además de la fauna que se pueda observar en la zona, el recorrido transcurre por caminos de tierra y senderos señalizados como rutas de pequeño recorrido, PR-MU-023.

Hito que demarca el Parque de El Valle.
   
        En este tramo alcanzamos la cota más alta de la etapa, a unos 550 metros de altitud. Ya llevo recorridos aproximadamente 50 kilómetros, por lo que aún me quedan unos 15 por delante.

        Voy alternando entre el camino y las opciones de senda. La mayoría las supero sin problemas, pero en la última senda antes del descenso tuve que bajarme varias veces, ya que el terreno era muy irregular y las curvas cerradas debido al desnivel que debía sortear.     

        Tras superar la última senda, comienzo el descenso por una buena pista, que, después de un cruce, se convierte en asfalto. Siguiendo el descenso, llego al Santuario de Fuensanta. Son las doce y media de la mañana, un buen momento para tomar algo en la cafetería del lugar, pero estaba cerrada, a pesar de la presencia de turistas que sacaban fotografías del entorno.

Santuario de Fuensanta.

       Después de este breve descanso, me dispongo a retomar la marcha, pero surge un pequeño contratiempo: el track que había preparado en casa me lleva hacia Murcia por unas escaleras, y luego el camino no está claro, ya que encuentro señales de dirección prohibida que prefiero no ignorar.

Ante esta situación, decido usar Google Maps en modo automóvil para dirigirme hacia Murcia, y más concretamente, hasta el alojamiento que tengo reservado para hoy.

        La entrada de Murcia por Alguezares que es una pedanía situada a 5 kilómetros de Murcia, en la falda de la montaña de la Cresta del Gallo, siguiendo las indicaciones del GPS llego al barrio el Progreso  que es un barrio constituido por un núcleo principal de población y un diseminado de huerta circundante a la ciudad de Murcia.

Rio Segura desde el Puente de los Peligros en Murcia.

        A la una de la tarde, cruzo el río Segura a través del puente de los Peligros, cerca se encuentra el alojamiento que es el Hotel de tres estrellas "Hotel Hesperia Murcia Centro", como su nombre indica está en pleno centro de Murcia.

        En esta primera etapa de la ruta, el calor es el factor predominante. Al inicio, los amplios terrenos de cultivo, con sus canales de regadío, dan paso a una zona desértica. Más adelante, en el último tercio de la etapa, se encuentra el puerto de La Cadena y el Parque Natural del Valle y Carrascoy. Aunque esta área es boscosa, no es una zona verde, ya que el tipo de terreno no favorece la retención de humedad.

Casa Consistorial de Murcia.



        La comida y la cena en Murcia me salieron bastante económicas, para el almuerzo, tenía un buen bocadillo que había preparado el día anterior, junto con algunas piezas de fruta, para la cena, fui a un supermercado y compré lo necesario para prepararme tanto la cena como el desayuno del día siguiente.

        Debido a la época del año que estamos, estamos en el mes de agosto, me eché una buena siesta a las horas de más calor, para luego hacer una visita por el casco antiguo de la ciudad.

        Primera etapa completada y con buenas sensaciones, mañana tocará madrugar para librar el calor, así que pronto a dormir.

Catedral de Murcia.