Etapa 6: Campanario - Trujillo.

 30 de Junio de 3023. 

Etapa 6: Campanario - Trujillo. 

Distancia:  89.67 Km.

Desnivel acumulado:  Positivo: 571 mts. Negativo: 429 mts.

Hora de Salida: 05:00 h.

Hora de Llegada: 13:00 h..

Tiempo empleado: 6:20 horas (Según Wikiloc).


Amanece en los campos de arroz de las Vegas del Guadiana en Ruecas.

        
        La ruta de hoy tiene un perfil descendente en los treinta primeros kilómetros para pasar a un perfil plano y más tarde en el kilometro sesenta empieza el ascenso, un ascenso de 893 metros en cuarenta kilómetros, así que comenzamos el día.

Albergue de Campanario.

        A las cinco de la mañana parto del albergue, una vez que dejo atrás las farolas que lo iluminan me encuentro en la más absoluta oscuridad, iluminado con mi foco y con la ayuda del GPS busco el Camino Mozárabe.

        En la total oscuridad se divisa las luces de una población que se encuentra en un cerro, está a bastante distancia pero el camino me dirige allí, al final se trata de la localidad de Magacela a 12 kilómetros de la salida de hoy.

Magacela en la oscuridad de la noche.

        Por Magacela entro por un barrio sin entrar en lo que es la ciudad, las calles por el barrio que paso están inundadas con el olor a pan recién hecho, me perdí un par de veces por no seguir las flechas y encontrarme con calles que al final no me dirigían hacia la salida de Magacela, por la carretera EX-348, pero enseguida tomo un camino a la izquierda para seguir por caminos de concentración.

        En estos caminos rodeados de campos de siembra, que no logro reconocer me cruzo con un coche que controla los riegos automáticos de la zona, en esta época del año para que el riego sea efectivo tiene que ser a horas muy tempranas, tan tempranas que todavía no se atisba por dónde va ha salir el sol.

Conquistador de Chile, Pedro de Valdivia, Villanueva de la Serena 

        A veintitrés kilómetros llego a Villanueva de la Serena, una localidad todavía dormida a estas horas de la madrugada, entro por la zona de la estación de autobuses y llego a la plaza dominada por la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, en pleno centro de Villanueva de la Serena.

Vía Verde de la vega del Guadiana.
  
        Aquí, en este punto del recorrido, me alejo temporalmente del Camino Mozárabe para adentrarme en la Vía Verde Vega del Guadiana, siguiendo el trazado de esta antigua vía, ocasionalmente interrumpida por las huertas por las que serpentea, avanzo sin contratiempos gracias a la clara señalización que marca el camino. Como su nombre sugiere, no tardamos en cruzar el río Guadiana, atravesando un antiguo viaducto que formaba parte de la infraestructura de esta vía ferroviaria.

Gran viaducto de la vía verde que cruza el río Guadiana.


Rio Guadiana desde el viaducto de la vía verde.

       Desde esta perspectiva elevada que ofrece el viaducto, se abre ante mí un espectáculo visual impresionante: extensos campos de árboles frutales, tierras cultivadas de huertas en dimensiones monumentales e incluso algún vivero de flores. Es en este tramo del recorrido donde verdaderamente nos sumergimos en el fértil valle del Guadiana, y cada paso que doy me permite apreciar la riqueza agrícola y la belleza natural que caracterizan esta región.

Tierras dedicadas al cultivo en la vega del Guadiana.

        
        Después de una gran extensión de melocotonares y cultivos, el camino nos saca a la carretera EX-864, para llegar a la localidad de Rena, la cual pasaremos por su cartel indicador, pero el track del viaje nos desvía hacia la derecha para ir paralelo al rio Ruecas.

        Comienza ahora una extensa llanura de unos veinte kilómetros rodeados de una red de regadío que en su primera zona según avanzamos es de arroz, si si arroz en Extremadura, no tenía ni idea que en Extremadura hubiera campos de arroz, luego irá cambiando a plantaciones de tomate y de pimientos, unos campos interminables que me hacen recordar a las extensiones que recorrí el año pasado en la ribera de Tajo en Portugal. 
        
Extensión de arroz y la localidad de Rena al fondo.

        
Durante el transcurso de la ruta por esta llanura, es posible observar las infraestructuras relacionadas con el suministro de agua, como acequias y sifones. En esta región, se atraviesan dos pequeñas localidades, Puebla de Alcollarín (en Badajoz) y Pizarro (en Cáceres), ambas con alrededor de 400 habitantes dedicados principalmente a labores agrícolas.

Uno de los sifones de agua en la vega del Guadiana.
  
      En esta zona, se cultivan una gran variedad de frutas y hortalizas, incluyendo tomates y pimientos el terreno es llano y ofrece buenos caminos gracias a los esfuerzos de concentración parcelaria. a unos cincuenta y tres kilómetros desde el punto de partida de hoy, se encuentra un canal importante que suministra agua a esta área, el canal de Orellana, que fluye con una gran cantidad de agua.

Camino de concentración parcelaria.

       
Una vez cruzado este canal, llego a la localidad de Campo Lugar, a diferencia de las poblaciones más recientes de Pizarro y La Puebla de Alcollarín, Campo Lugar fue fundada en la Edad Media, en este punto, el paisaje cambia pasando de terrenos verdes y de regadío a terrenos más secos destinados al cultivo de cereales y a la ganadería.

        Mientras dejaba atrás los bajos edificios de la localidad y poco antes de salir de la población, me encontré con un posible lugar para detenerme y disfrutar de un almuerzo, sin embargo, decidí continuar mi camino sin saber cuándo surgiría otra oportunidad para hacer una parada así que tomé un pequeño riesgo sin saber si encontraría otro lugar adecuado más adelante.

Travesía de Campo Lugar (Cáceres).

       Mi travesía, en este punto, comienza a presentar un ligero desnivel a medida que avanzo por la carretera, finalmente, llego a un área de servicio poco antes de llegar al cruce de la carretera de Miajadas, aquí decido tomar un descanso para recargar energías, un Cola Cao y un croissant serán más que suficientes para esta breve pausa.

                Son las nueve de la mañana y llevo casi sesenta seis kilómetros cuando atravieso la población se trata de Abertura, en este punto dejo atrás el asfalto para ir por la Cañada real Leonesa, un buen camino de tierra, el trazado comienza en un parque al salir de Abertura, la cosa tiene buena pinta y con un desnivel casi nulo.

Al salir de Abertura el camino va por la Cañada Real Leonesa.
        
        Siguiendo la vía pecuaria, tuve la oportunidad de disfrutar de la vista que nos brinda dominando entre la llanura de la Sierra de Santa Cruz., además se atraviesa amplias parcelas destinadas a la ganadería, donde el ganado vacuno pasta de manera apacible y predominante.

Sierra de Santa Cruz desde la Cañada Real.
    
        Siguiendo por la Cañada Real se asciende hasta el penúltimo alto de la jornada que se encuentra en el cruce de la carretera CC-24.1, ahora el buen camino de la Cañada se vuelve más abrupto, sigue en ascenso, la irregularidad del terreno y la proliferación de matojos y monte bajo hace que en algún momento pierda la senda o me meta en algún paso malo, pero nada más allá de tener que bajarme de la bici y reorientar la dirección.
       
La Cañada nos enseña la extensión de la dehesa extremeña.

        Me encuentro a veinte kilómetros de Trujillo, la etapa de hoy está en su parte más entretenida, la Cañada vuelve a ascender para posteriormente comenzar el descenso hasta el humedal de El Cortijo de la Torrecilla, donde observo un buen número de cigüeñas y otras aves.

        Más adelante se cruza el río Magasca, que debido a su bajo nivel atravieso su cauce al lado de su puente romano.

Puente romano sobre el rio Magasca.

        A cinco kilómetros se encuentra Trujillo, pero serán los kilómetros más intensos de la etapa de hoy, si antes se nos desdibujaba un poco la Cañada Real, pero sin mayores problemas, en este momento el camino horadado de tantas lluvias y sin la tierra que le da el firme, aflora la piedra en forma de grandes losas y escalones, que hace que tenga que usar la ayuda al empuje para librar un ascenso breve pero muy roto.

Lo últimos kilómetros a punto de llegar a Trujillo.

        Ya en las cercanías de Trujillo, en lo alto de la colina se encuentra la ermita de Santa Ana, ermita en estado calamitoso y ruinoso, su silueta hace que me pare un momento y visite sus malograda existencia.

        A través de un pequeño polígono industrial y después de cruzar la carretera que circunvala a Trujillo, llego a su plaza mayor, situado en la parte alta de la cuidad, son casi las doce de la mañana.

Ermita de Santa Ana, en las cercanías de Trujillo.


A la llegada y vista panorámica de Trujillo

        Teniendo anotado el alojamiento voy en busca de la plaza mayor y así orientarme en el entramado de calles de un pueblo que guarda la esencia medieval, el lugar en cuestión es el Hostal Mesón casa Hueso , un acierto en cuanto localización, al lado justo de la plaza de Trujillo, llegué sobre las doce del  mediodía, me atendieron muy bien, subí la bici a la habitación, y empecé con la rutina de todos estos días, el aseo propio, lavar la ropa, etc., hoy se secará bien la orientación de la habitación hace que le dé el sol el las horas fuertes del día.

Plaza mayor de Trujillo.


        Como era pronto para comer, me di una pequeña vuelta por la plaza mayor y terminé tomándome una cerveza en una cervecería que se encuentra en la misma plaza, por cierto, la tapa que sirven con la consumición es de diez.

        Después de hacer tiempo para comer, me dirijo al mesón y allí disfruté de un agradable menú, luego un poco de siesta, ya que la tarde aquí, como en todo el viaje que voy haciendo, hace mucho calor y que mejor que estar bajo el aire acondicionado.

        Por la tarde ya cuando bajó un poco el sol me dediqué a dar una gira por todo el casco antiguo, amenizado por las locuciones que me podía descargar por medio de códigos bidi de los edificios más emblemáticos de Trujillo.


Puerta de San Andrés en Trujillo.

La Alberca, una antigua poza árabe con agua.

A fondo las torres de la Iglesia de Santa María de Trujillo (Cáceres).

        
Trujillo es una villa monumental que alberga, tras sus puertas y en el entramado de sus calles, una mezcla fascinante de vestigios visigodos, romanos, árabes y cristianos. Esta fusión da lugar a un rico patrimonio histórico y cultural. Además, Trujillo es conocida como la cuna de ilustres conquistadores como Francisco Pizarro, quien conquistó el Perú, Francisco de Orellana, el descubridor del río Amazonas, y Diego García de Paredes, compañero de Pizarro en sus hazañas.

Panorámica de la Plaza Mayor de Trujillo.

        Después de explorar parte de la rica historia de Trujillo, es hora de relajarse en su hermosa plaza mayor mientras espero la hora de la cena. Opté por cenar en el mesón donde me alojé, ya que ofrecen un servicio excepcional y la experiencia fue sido maravillosa.

        En la habitación me dediqué a editar el video y preparar todo el equipo necesario para la etapa del día siguiente, luego pasé a revisar la ruta planificada ya que a raíz de las conversaciones con el personal del mesón y las recomendaciones recibidas, estoy considerando realizar algunos ajustes en la ruta planificada.

Hoy como otros días, la bicicleta dormirá conmigo.

        Otro día que está a punto de terminar y de momento todo va sobre lo previsto, siempre pregunto a los del lugar por la etapa que tengo prevista hacer, para saber qué opinan sobre ella, que si es dura, que por ahí no es aconsejable ir, etc., aunque con las aplicaciones de rutas como el Wikiloc, te puedes hacer una buena idea del recorrido antes de realizarlo.

        Así que como es costumbre en esta ruta, pronto a la cama que hay que madrugar para evitar las horas duras de sol, ya tengo ganas de ir avanzando hacia el norte para que las temperaturas no sean tan alta.

        Así que hasta mañana.

 Casas principales de los Chaves-Sotomayor de Trujillo.






        

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