6ª Etapa: Villaviciosa - Muros de Nalón.

 6 de agosto de 2020.


6ª Etapa: Villaviciosa - Muros del Nalón  

Distancia: 86,18 Km. 

Desnivel Positivo: 1.372 mts. 

Desnivel Negativo: 1251 mts. 


Empieza la etapa de hoy.

        Buenos días son las 7 de la mañana aproximadamente, después del descanso es la hora de levantarse, toca el aseo mañanero  y recoger todos los bártulos que tenemos por la habitación, bajamos con las alforjas al hall del albergue y ahí están las e-bikes como esperando a un nuevo día, así que colocamos las alforjas y partimos en primera instancia a desayunar.


Estatua a la Manzanera en Villaviciosa.

        Al poco de empezar la marcha, en la calle del Sol, vemos unas cuantas cafeterías y decidimos parar aquí a desayunar, cae un café con leche con una pieza de bollería y vamos a comenzar.

        El día ha salido espectacular, el cielo azul indica que tendremos por lo menos buen tiempo, el calor ya lo iremos viendo, es agosto pero las corrientes anticiclónicas del atlántico no dejan subir excesivamente las temperaturas.


Izquierda el Camino Primitivo, de frente sigue el Camino del Norte.

        La salida de Villaviciosa es por un parque  dirección al campo de fútbol,  tocamos un poquito el asfalto de la carretera que lleva a Amandi y antes de llegar a esta localidad dejaremos el asfalto para dirigirnos a la izquierda hacia Casquita, a unos dos kilómetros está la bifurcación del camino, a la izquierda nos llevará a Santiago por el Camino Primitivo o si seguimos de frente, continuaremos por el Camino de la Costa o del Norte, nosotros seguiremos de frente siguiendo el Camino del Norte. 


Libro de registro en Casquita.

        En la bifurcación se encuentra la ermita de Casquita, aquí sellaremos la credencial del camino, y escribiremos una nota en el libro de registro, cuando la estamos redactando aparece una señora, la señora Maripaz,  que es la que abastece con agua, algo de fruta y buenas palabras a los peregrinos que por ahí pasan a lo largo de los días del año, este verano es un poco extraño por el descenso de peregrinos, pero aún así con los problemas de la pandemia son unos cuantos que pasan por aquí, Maripaz nos hace una foto con la esperanza de que la colgara en su instagram pero dada la afluencia de ese día tuvo que elegir entre varios peregrinos y no nos tocó a nosotros, de todas las maneras dejo aquí su instagram, faunino_casquita.


Camino a Grases, bien indicado.


      Ya abandonamos Casquita por carretera secundaria para más tarde coger caminos de tierra hacia Grases y una vez que pasamos la autovía empezar el ascenso al alto de La  Cruz, que es por un camino con bastante pendiente y además en no muy buen estado con bastantes piedras, lo que nos hizo en alguna ocasión echar pie a tierra aún llevando e-Bike, enlazaremos con la carretera secundaria que sube al alto de la Cruz y una vez arriba contemplamos y disfrutamos del paisaje que nos ofrecen los montes de Asturias, ahora iniciaremos un largo y vertiginoso descenso, tanto es así que cuando ya llevábamos bajando un rato reducimos la velocidad para no pasarnos el cruce que teníamos que hacer más adelante.


Subida al alto de  La Cruz.

        Paramos donde marcaban las flechas pero me equivoqué al coger el camino que gira a la izquierda, resulta que había otro que no se veía bien ya que estaba escondido por la vegetación,  así que antes de perdernos del todo opté por volver sobre nuestros pasos para tomar el bien el cruce y así marchar por el camino correcto, viendo el mapa se podía observar que al final los dos caminos coincidirían  más adelante.


Impresionantes vistas bajando del Alto de la Cruz.

        Más adelante en Pión, casi hacemos el redondo perfecto al indicarnos las flechas la entrada a la iglesia de Pión, y a su salida nos encontramos con una puerta a una urbanización cerrada a cal y canto, proseguimos la marcha por la carretera AS-331, para iniciar el segundo ascenso del día, este es totalmente por carretera secundaria, así que lo que queda es ir subiendo poco a poco, recuerdo en algún momento desconectar la asistencia y poder ir subiendo,  adelantamos a un ciclista de la zona totalmente equipado pero con una bicicleta un tanto extraña, a mí me pareció que era de carretera o algo parecido. 

        Enseguida supimos que era ese artefacto, era una bicicleta plegable y eléctrica de esas urbanas, y que nos pasó sin problemas, claro tenia el hándicap de que iba sin el peso de las alforjas y nosotros no podíamos gastar batería a lo loco.



        El descenso empieza por la carretera pero enseguida las flechas nos indican que debemos salir a una pista a la derecha, seguiremos bajando y después del camping volvemos a coger caminos asfaltados dejando a nuestra izquierda el hospital de Cabueñes y la universidad Laboral, el camino es serpenteante entre las casas y chalets, en esto que vemos un supermercado y paramos para coger provisiones, una vez hecha la compra seguimos serpenteando según nos van mandando las flechas.


La universidad laboral de Gijón.

        En un punto llegamos a una rotonda, pero tanto las flechas como el GPS nos manda ir por dirección prohibida por lo que nos ponemos a dar más de una vuelta a la rotonda hasta que un paisano de la zona sin preguntarle, nos indica el camino correcto que debemos tomar.


Curiosa fuente en la entrada a Gijón.

        Entramos en Gijón,  por una calle paralela a la que alberga el estadio de El Molinón, el cual lo dejamos a la derecha, ya envueltos en la circulación de la ciudad vamos por una  avenida que en principio debiera ser una línea recta hasta la playa de San Lorenzo, pero las obras que existen nos cortan alguna calle y debemos desviarnos, por fin llegamos a la playa, hacemos la parada para poder ver la playa con mas detenimiento y a hacernos una foto de nuestro paso por Gijón,  seguimos hacia la plaza del ayuntamiento por un carril bici ya que por el paseo hay bastantes peatones y tampoco queremos que nos pongan ninguna multa de recuerdo, llegamos a la plaza del ayuntamiento y prosiguiendo nuestro camino encontramos a Don Pelayo.


Posando en el paseo de Gijón.


Playa de Gijón.

        La salida de Gijón es por una avenida plagada de semáforos, los cuales creo que pillamos todos en rojo, seguimos rodando hasta que van desapareciendo las casas y va convirtiéndose en zona industrial, para mi es feo y sucio de narices pero bueno, es lo que tiene la ciudad, relacionada con la minería y la siderurgia, dejando esto a parte, en la salida de Gijón nos encontramos dos sitios en los que hay que extremar las precaución, la primera es que tuvimos que pasar las vías del tren sin paso a nivel y la segunda es que tuvimos que girar a la izquierda en un tramo de carretera en la que había mucha circulación,  en la que paramos a la derecha y esperamos a que estuviese libre el paso tanto en un sentido como en el otro, cosa que nos estuvo expectantes un buen rato, hasta poder cruzar con seguridad.

Salida de Gijón.

        Una vez pasado el cruce vamos unos kilómetros por la carretera secundaria CE-6, hasta Santa Eulalia, donde aprovecharemos y tomaremos un refrigerio a la sombra de un buen árbol,  en este bar también hay algún cliente que nos indica cuál es la mejor manera de proseguir el camino,  nosotros al final seguiremos a las flechas, después de un rato, ya por caminos asfaltados hasta la localidad de Tamón para iniciar la recta hacia Avilés  


        Seguimos las indicaciones del camino que nos llevan por la carretera AS-119, pasamos por al lado de una enorme fábrica siderúrgica, seguimos y ya en Avilés nos encontramos cruzando sobre las vías del tren por una curiosa pasarela que te hace entrar dentro del museo "La grapa", por lo menos por ahí nos llevó el GPS para después volver a cruzar las vías del tren y ya en plena casco urbano iniciar la salida de la misma.

Pasarela de La Grapa, Avilés.


Por las calles de Avilés.

        La salida es por la Avda. de Alemania, y una vez que hemos salido de la ciudad ya por la zona residencial, encontramos una plazoleta a modo de isleta con una fuente de agua y unos árboles donde cobijarnos del sol que ya hacía de las suyas asi que, hacemos un alto en el camino para comer, esta vez bocadillo de sardinas, la próxima vez, ya le he dicho a Ricardo, que compraré más latas ya me quede algo corto.


Isleta donde paramos a comer.

        Una vez que nos hemos comido y descansado retomamos el camino, ya quedan 22 kilómetros,  pero éstos según el perfil son con algo de desnivel, pasamos por Piedras Blancas, ahora el camino se va intercalando con caminos asfaltados, pista y una vez que cogemos la carretera secundaria llegaremos a San Juan del Arenal, que nos dejará un bonito paisaje con la desembocadura del río Nalón. 


Parando a por agua en Campiello, (Piedras Blancas).


        En San juan del Arenal se coge ya la carretera hacia Soto del Barco, pero antes haremos una visita al barrio del castillo de San Martín, aquí sin querer bajamos hasta el río,  dejándonos una bonita estampa con el embarcadero y una a pequeña cala sin salida, por lo que tuvimos que subir otra vez a lo alto del castillo y coger la calle del peregrino para salir por la carretera nacional y cruzar el largo puente para salvar el soto del Nalón. 


Embarcadero de San Esteban en Soto del Barco.


        Seguimos por la Nacional que va a Muros del Nalón y ya en la localidad nos dirigimos directos a la plaza del pueblo, que es donde se encuentra nuestro albergue Camino de la Costa, donde nos atendió una chica muy maja que nos enseñó las dependencias del albergue.


Albergue Camino de la costa de Muros de Nalón.

        Nos alojamos en una habitación compartida con otros dos bicigrinos,  que casualidades de la vida son de cerca de Logroño, con un pero, que no conocían nuestro grupo ciclista, Andanzas en btt, la disculpa podría ser que ellos hacen otra disciplina de btt distinta a la nuestra.


Plaza de Muros de Nalón.

        Después de una agradable ducha y de hacer las tareas pertinentes como la colada y poner a cargar las e-bikes, nos vamos a dar una vuelta por el pueblo, sello en la oficina de turismo y una vez ya cayendo la tarde nos disponemos a cenar, que después de buscar un sitio que nos diera al ojo, terminamos en el bar del albergue, que por cierto estuvo muy bien.


Nuestra colada.

        Una crónica larga, como larga fue la ruta de hoy, llegamos un poco cansados, dos picos al principio de la etapa  para luego ir totalmente llanos al nivel del mar para volver a tener algún que otro desnivel a la llegada del destino.


        A dormir, que mañana será otro día. 


        Por cierto la Foto que falta es la nuestra en Faunino y Casquita, y está aquí.


La foto que nos hicieron en Faunono y Casquita.


Más fotos de la jornada de hoy aquí.


        










2 comentarios:

  1. Buena crónica del día.
    Es el alto De la Cruz donde oíamos los coches pasar por la autopista que va oculta dentro de los montes?
    Yo creo que si. Ya se me van olvidando algunas cosas, pero fue impresionante.
    Muy bien atendidos en Muros de Nalón. Así da gusto. Lo cierto es que por ahora en todos los sitios.
    Salud y esperanza,
    Barrancas

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