Etapa 17: Camino inverso de Santiago Francés, Cardeñuela de Riopico - Logroño.

 22 de septiembre de 2022.

Etapa 17: Cardeñuela Riopico - Logroño.

Distancia:   112 km.
Desnivel acumulado: 1.151 m.
Tiempo empleado: 10 horas 54 minutos.

Gran cruz de madera que se encuentra en el alto de Matamulas cerca de Atapuerca.
  
Crónica:

        Todo llega a su desenlace y esta vez le toca a mi viaje en e-bike con alforjas, desde Oporto en Portugal hasta Logroño, ciudad de destino y ciudad dónde resido, han sido diecisiete días de bicicleta  disfrutando del camino, con sus gentes, lugares y recuerdos, un viaje placentero que nos brinda el rodar con la bicicleta que es un medio de transporte que no va tan rápido como puede ser el automóvil o tan pausado como ir caminando, pero los días de vacaciones no se pueden aumentar, así que de este modo también da tiempo para ver y disfrutar cada instante del camino.

        Hoy el día comienza temprano, y es que ya nos avisó la propietaria del albergue que para las ocho de la mañana quiere que todo el mundo esté fuera, un horario exigente para un establecimiento privado como este, que no es del todo un albergue, pero según sus palabras no quiere que este lugar se convierta en un hotel en el que el horario de salida sean las doce del mediodía.

A las siete de la mañana todavía es de noche en Cardeñuela de Riopico.

                Así que hacia las siete de la mañana ya estoy despierto y con todos los útiles preparados para bajarlos y montarlos en la e-bike, que esta noche ha dormido en el almacén del local, una vez que tengo todo preparado la aparco enfrente del bar del Hostal.

                En el bar, la dueña con el peinado desaliñado que indica que se ha levantado hace poco, me pregunta que es lo que deseo para desayunar, espero en una mesa junto a una pareja de peregrinos franceses pacientemente a que el desayuno esté preparado, mientras comentamos que el establecimiento está muy bien pero que todo sería mejor si los modales de la dueña no fueran tan dictatoriales, vamos que con poner una cara más amable la experiencia hubiera sido de sobresaliente alto.

Ayuntamiento de Cardeñuela de Riopico.

                Con la calma acostumbrada en todos estos días tomo mi desayuno y hacia las ocho de la mañana doy comienzo a la etapa de hoy, son terrenos de sobra conocidos, ya que el año pasado realicé esta etapa con Ricardo en el comienzo de la ruta del Cid.

                Desde que tomé el recorrido de Oeste a Este, desde Santiago días atrás, el sol al estar amaneciendo y al tenerlo de frente en los primeros compases del día resulta molesto, por lo que uno desea que el Sol vaya ascendiendo y cese de molestar, el día ha salido totalmente despejado pero como estamos en la provincia de Burgos y a una altitud de 900 metros la sensación térmica es de bastante fresca.

Salida del Sol en el alto de Matamulas.

               A cuatro kilómetros de la salida se encuentra la primera cima que hemos de rebasar, se trata del Alto de Matamulas, supongo que como su nombre indica en estos parajes debieron morir varias mulas por las características del terreno con el paisaje duro, pedregoso y sin atisbo de vegetación.

               Esta zona también es conocida por el campo de tiro y de maniobras que tiene el ejército, en mi transcurrir se sitúa a mi derecha una valla de alambre con varios carteles de advertencia, que rezan que el recinto adyacente es terreno del ejército.

Cruz de Atapuerca en el alto de Matamulas.

                Un poco más adelante se encuentra una gran cruz de Madera que divide el valle de Riopico y el de Atapuerca, ahora, mientras los peregrinos jadean ante la subida por la que transitan, a mí me toca bajar por esta zona rocosa y descarnada, con algún pequeño contratiempo a la hora de descender ya que tuve que hacer pie en alguna ocasión para evitar aterrizar y terminar en el duro suelo, si difícil es la subida en dirección a Burgos, la bajada en dirección contraria también se las trae.

                Una vez que he descendido por el camino antes descrito se llega a la población de Atapuerca, reconocida por sus yacimientos arqueológicos, los más importantes de Europa descubiertos accidentalmente al realizar movimientos de tierra para el ferrocarril minero del siglo pasado.

Paso del Camino por la localidad de Agés, (Burgos).

               Después de Atapuerca se encuentra la localidad de Agés, una pequeña población que con el paso de los peregrinos cobra una nueva vida dotándoles de servicios como una cantina y el albergue, de otra manera sería un lugar casi abandonado.

            A las nueve de la mañana hago una parada en el Monasterio de San Juan de Ortega, en este punto sin demora tengo que telefonear al trabajo, ya que cuando me marché de vacaciones no se quedó muy claro el día de regreso de las mismas, tanto que podía ser hoy mismo o mañana, me quedé más tranquilo al resolver que tenía que regresar un día mas tarde, por lo que la paz y la tranquilidad volvió de nuevo a mi Camino de Santiago.
            
Mi e-bike con el Monasterio de San Juan de Ortega.

                A partir de este momento inicio la subida al alto de La Pedraja, un puerto que en mi sentido de la marcha resultará más suave que atacándolo por Villafranca Montes de Oca.

            El número de peregrinos es numeroso, así que no encontraba un lugar para pasar la noche anterior, es una zona con pocos pueblos, son pequeños y con  escasos alojamientos así que enseguida se encuentran completos.

La Ancha pista que sube al alto de la Pedraja.

            Subiendo el alto de La Pedraja noto que la rueda delantera ha perdido presión, por lo que le hecho espuma del bote repara pinchazos, que si mal no recuerdo compré en una gasolinera en Portugal hace unos cuantos días atrás, un pequeño contratiempo que solventé sin entretenerme mucho, la rueda la dejé un poco más alta de presión para evitar tener que parar para volver a meterle aire, por lo que más adelante tuve que parar para quitarle algo de presión, ya que me la e-bike me iba pegando botes como un balón de fútbol.

            Sin llegar a la parte más alta del puerto, a dieciocho kilómetros de la salida se encuentra un área de descanso del Peregrino, este año, al contrario que el anterior, se encuentra abierto y pleno de peregrinos de distintos lugares de procedencia y atendido por su responsable, atendiendo un puesto con fruta y bebida para saciar al peregrino.

Área de descanso de La Pedraja.

            Hice una pausa para charlar un poco con él y me comentó las dificultades de tuvo estos años atrás con la pandemia, de hecho el año pasado estaba cerrado,  y la inexistencia de peregrinos, la verdad que fueron tiempos difíciles y esperemos que no vengan muchos más, con un "Buen Camino" nos despedimos, mientras él seguía atendiendo su puesto.

Monumento en recuerdo de los fusilados en este lugar en la guerra Civil.

            Después de pasar por el monumento por los caídos en la Guerra Civil Española, lugar donde fusilaron unas trescientas personas en 1936 en los primeros meses de la guerra civil española, después de observar y contemplar el monumento, como en años anteriores, reanudo la marcha por un buen camino y en continuo descenso.

Hermosa vista desde el Alto de La Pedraja.

            El camino en el puerto de La Pedraja es ancho y de buen firme, aquí también se encuentra innumerables peregrinos, y es que la mañana es propicia para el senderismo, todavía no hace calor y el bosque nos brinda una buena sombra.

            
Camino sombreado hacia Villafranca Montes de Oca.
        
            Cuando llevo transcurridos veinticinco kilómetros de la etapa de hoy y han pasado casi tres horas desde el inicio me encuentro en Villafranca Montes de Oca que indica que ya he pasado el puerto de La Pedraja en su totalidad y que el perfil de la etapa, salvo alguna elevación, lo dominante será en  descenso hasta el fin de la ruta.

Villafranca Montes de Oca con la Iglesia de Santiago apóstol.

            Después de este bosque, aparecen los amarillentos y lisos campos de cereales  y a la falta de sombra, en este tramo zigzagueamos la carretera Nacional N-120 por las localidades de Espinosa del Camino, Villambistia, Tosantos, hasta legar a la población de Belorado.

            En Belorado, me detengo delante de la Iglesia y hago un alto para vi9sitar su interior, el camino que realizo por sus calles es un poco más directo que que realizamos el año pasado para salir dirección a Burgos, ya que aún tengo fresca la memoria de la ruta del Cid del año pasado.

Placa en el suelo de Belorado en el camino de Santiago.

        Saliendo de Belorado, se sigue por el mismo tipo de camino y de paisaje ardiente por la hora que se va acercando al mediodía, se atraviesan las localidades de Villamayor del Río y un poco más desplazado de la N-120 y a ocho kilómetros de Belorado se encuentra Viloria de Rioja.

        Viloria de Rioja que aún teniendo este apellido, sigue siendo una localidad de la provincia de Burgos, es lugar de nacimiento de Sto. Domingo de la Calzada, Santo que dedicó su vida y obra a mejorar la asistencia a peregrinos que recorrían el Camino de Santiago.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.

Pila Bautismal dónde fue bautizado Sto. Domingo de la Calzada.


        Visito el interior de la iglesia de Nuestra señora de la Asunción de Viloria, y allí se encuentra una vecina de la localidad, la cual me comenta, llena de alegría, la disputa que acaba de ganar el pueblo ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León sobre el paso del Camino de Santiago por su casco urbano, ya que con las modificaciones de la construcción de la autovía, excluían a este municipio del paso del camino.

            Después de esta interesante conversación, prosigo el camino hacia Castildelgado y Redecilla del Camino, y así dejar la provincia de Burgos para entrar en la provincia de La Rioja

Vista del amarillento paisaje desde el mirador de Grañón.

            A la una y media y transcurridos sesenta kilómetros me encuentro den Santo Domingo de la Calzada, donde pararé para buscar un lugar para comer, en la plaza de La Alameda encuentro una terraza perpetrada con una buena sombrilla que será destino de mis pretensiones.

            
Mi e-bike aparcada en la plaza de la Alameda.

            La terraza del restaurante donde repuse fuerzas se llama La Gallina que Cantó, mucha es la afluencia de comensales, tanto que me hice con la última mesa libre, por lo que un peregrino Polaco me pidió permiso para compartir mesa, así que durante la comida estuvimos charlando sobre las aventuras del Camino.

            Siendo las tres de la tarde y después del café me despido del peregrino, sigo mi camino hacia Logroño, un camino conocido y reconocido para mí, ya que no es extraño que haga dicha ruta dos o tres veces al año, así que por el camino memorizado van cayendo los kilómetros poco a poco.

Vista de mi salida de Santo Domingo de la Calzada.

            El calor aprieta bastante por lo que son escasos los peregrinos que se aventuran a estar a estas horas caminando, las siguientes poblaciones por las que pasa mi ruta son Cirueña Azofra, en Azofra me encuentro con un bicigrino que iba caminando empujando la bici, me dio la sensación de que le quedaban pocas fuerzas para seguir montado, por lo que le dije que comiera uva que le daría la suficiente energía para seguir su camino.

El paisaje va cambiando con el aumentado de los Viñedos.

            Los campos de cereales van cediendo a extensos viñedos, estamos en La Rioja que es una región vitivinícola por excelencia, la siguiente población es la ciudad de Nájera, son las cuatro y media de la tarde y ya llevo a mis espaldas ochenta kilómetros.

Llegando a Nájera con el alto de la Calavera.

            De Nájera a Ventosa, que es la siguiente población del Camino, se encuentra el alto de San Antón, última ascensión del día, se empieza a subir después de atravesar el paso inferior de la antigua carretera nacional N-120, el camino empieza a empinarse a la subida de las bodegas de Vivanco, ya estamos rodeados de viñedos, a la bajada del alto de San Antón y como conocedor del camino, tengo dos opciones, seguir recto hasta Navarrete o desviarme por Ventosa que es por donde se desarrolla el camino en estos últimos años.

Nuevas escaleras para los peregrinos en el alto de San Antón.

            Después de Ventosa, donde coincido con un residente local resultando ser un antiguo compañero de trabajo, ya se nota la cercanía de mi lugar de procedencia, ya en Navarrete lugar donde el cincuenta por ciento de mis rutas locales en btt pasan por aquí, decido parar y entrar a visitar la iglesia de Nuestra señora de la Anunciación, que me sorprendió enormemente el interior y su gran retablo.

Retablo de la Iglesia de Nuestra Sra. de la Anunciación en Navarrete.


        Después de estar un rato en su interior ya solo quedan recorrer los doce kilómetros que queda hasta Logroño, la entrada la realizo por el parque de La grajera son las seis y media de la tarde y enormemente contento y con la satisfacción de llegar al destino, doy por finalizada la aventura de un gran recorrido que duró más de diecisiete días, si contamos los que estuve parado en Santiago de Compostela, desde Oporto en Portugal hasta Logroño en España.

El embalse de La Grajera con la ciudad de  Logroño que se divisa al fondo.

          Con esto doy fin a la ruta que empezó a gestarse en los primeros compases del año, primero con escepticismo, no porque no podría aguantar tantos días de ciclo turismo en btt, sino lo que más me costó fue el tema de la logística, el llevar la bici con las alforjas hasta el punto de partida, claro que se puede hacer con dinero, pero siempre de un modo razonable, gracias a mi amigo y vendedor de confianza de Rioja Sport, no tuve problemas en mandar los paquetes al hotel de destino, y una cosa que creo que es importante es usar una empresa conocida de mensajería, yo siempre he usado Seur, también dar las gracias a mi familia que me apoya en este tipo de aventuras, y es que aún sabiendo el apoyo recibido, el estar fuera de casa siempre resulta otro hándicap que te hace tener una buena tranquilidad a la hora de ausentarse tantos días de casa. 

      La experiencia, como en todos las rutas de varias etapas es extraordinaria, uniendo las pequeñas aventuras, preciosos paisajes y también la solidaridad de peregrinos y personas que sacan lo mejor de cada uno a lo largo del camino. 

   Así que por todo ello, dejó abierta la posibilidad de que próximamente nos encontremos liados en otra aventura en BTT, aunque sea en e-bike.

   Por cierto la planificación de una posible ruta de varios días, comienza con la finalización de este conjunto de crónicas, así que hasta la próxima.

     Bebeteros somos y en el camino nos encontraremos. 

      Saludos.

Etapa 16: Camino inverso de Santiago Francés, Frómista - Cardeñuela de Riopico.

 21 de septiembre de 2022.

Etapa 16:Frómista - Cardeñuela de Riopico.

Distancia:   85 km.
Desnivel acumulado: 685 m.
Tiempo empleado: 8 horas 20 minutos.

Un bicigrino me saluda en el camino en el cerro de Otero.

            Crónica:

            Buenos días, amanece otro día soleado como lo demuestra la primera fotografía del día desde la ventana de mi habitación, un azul cielo perfecto lo que hace que el día sea de lo más agradable para el transcurso de la ruta que nos llevará hasta Cardeñuela de Riopico, una pequeña localidad que se encuentra cercana una vez pasada la ciudad de Burgos, recordemos que mi singladura es a la inversa al camino de Santiago de Compostela.

            A las ocho y media de la mañana me amanece en la habitación, entre cerrar las alforjas desayunar y colocarlas en la bici hace que a las nueve menos diez esté todo preparado para la marcha, antes de nada hago una parada en la Iglesia de Frómista para despedir a la localidad y empezar a pedalear.

Mi e-bike dispuesta para la ruta.

            Lo primero que me encuentro nada más salir de Frómista es el Canal de Castilla, en la esclusa cercana a la localidad, en este punto leyendo los carteles informativos coincido con un bicigrino que hace la ruta del canal, que anda perdido ante la falta de alguna indicación para proseguir con su marcha, una vez que parece que encuentra la ruta nos despedimos deseándonos un buen viaje.

Esclusa del Canal de Castilla a la altura de Frómista.

            El Canal de Castilla fue construido entre los siglos XVIII y XIX para unir las ciudades de Segovia con el puerto de Santander a través de un sistema navegable, esta obra faraónica no llegó a culminarse por el nacimiento del ferrocarril que era un medio de transporte mucho más rentable, este canal tiene algo más de 200 Km.

        El Camino de Santiago transita en paralelo al Canal durante cinco kilómetros, separándose de él en un embarcadero con la nave con el nombre de Juan de Homar, el barco realiza el recorrido de Frómista hasta este punto, el embarcadero de Boadilla del Camino, el nombre de la embarcación es en homenaje a uno de los impulsores del canal.
        
El Canal de Castilla desde el embarcadero de Boadilla del Camino.

            Me encuentro por Boadilla del Camino hacia las diez de la mañana, cómo se ha pasado el tiempo, entre encontrarme con el bicigrino perdido y disfrutar de la vereda del canal llevo en una hora cinco kilómetros, así no me voy a cansar ni gastar la batería de la e-bike lo más mínimo.

            Cuando Salgo de ésta localidad paso por un área de descanso de peregrinos, este lugar tiene una fuente particular que mana agua al hacer girar un gran volante, una curiosa forma de sacar agua de la fuente que no pasa inadvertida para los peregrinos que transcurren por aquí.
            
Rollo gótico de justicia junto a la iglesia de Nª. Sª. de la Asunción en Boadilla del Camino.

            Después de Boadilla del Camino el trazado discurre por un ancho camino de tierra en buenas condiciones que después de pasar un cerro a mitad de recorrido, se llega a la localidad de Itero de la Vega.

            Estamos en la provincia de Palencia en la Comarca de Tierra de Campos, el paisaje es el natural de la de llanura de la Meseta norte, son grandes llanuras salpicadas de algún pequeño cerro entre grandes extensiones de tierras de cereal, que en esta época ya están cosechadas, ésta zona sigue sigue siendo una de las principales áreas cerealistas de España, de ahí que reciba el nombre de "granero de España".

Extensas llanuras es la característica principal de la comarca de Tierra de Campos.
        
            A la salida de Itero de la Vega se pasa por una zona de esparcimiento con una ermita, en la cual para acceder a la puerta de entrada hay que darle la vuelta ya que ésta no mira hacia el camino, decido ir a visitarla pero es en vano ya que está cerrada.
            
En la puerta de la ermita de la Virgen de la Piedad en Itero de la Vega.

            Después de la salida de Itero de la Vega y del paso por su ermita se llega a la orilla del río Pisuerga, por donde iremos en paralelo unos metros hasta llegar al puente de Itero, este es un puente estrecho y regulado por semáforos para dar paso alternativo, que sirve para cruzar el río Pisuerga y que al rebasarlo se cambia de provincia por lo que, en mi camino, abandono la provincia de Palencia para entrar en la provincia de Burgos

Puente sobre el río Pisuerga, entre las provincias de Palencia y Burgos.

Rio Pisuerga desde el puente entre las provincias de Palencia y Burgos.

        En el kilómetro treinta toca subir el alto de Mostelares o  de Castrojeriz, si fuerte es la pendiente den dirección hacia la provincia de Palencia, en esta dirección podría a asegurar la dificultad es mayor como así la pendiente, una gran recta asciende hasta el alto.

Mirando hacia atrás sin llegar a la cima del alto de Mosterales.

        No quiero asegurar pero la pendiente seguramente que sobrepasa en alguna ocasión de 10% , en mi afán de subir con poca asistencia, el avance se me hace bastante lento tanto que algún peregrino se queda observando pensando que mi e-bike no era lo suficientemente potente como para vencer este ascenso, lo que no quiero es llegar a la cima si haber hecho esfuerzo alguno, así que retraso subir la asistencia del motor hasta que la pendiente se hace imposible.

        Una vez arriba toca como premio observar unas estupendas vistas de las llanuras de estas tierras, tengo hacia atrás el camino desde Itero de la Vega y hacia adelante toda la extensa llanura con el cerro del castillo de Castrojeriz y su pueblo como protagonistas.

Camino de descenso a Castrojeriz.

            En la cima de este cerro observo el lento caminar de los peregrinos y el lento ascenso de los bicigrinos, todos se afanan como pueden en vencer esta importante tachuela en la etapa de hoy.

            El descenso también tiene un desnivel importante, un poco suavizado para los peregrinos hacia Santiago ya que cuenta con alguna curva que disimula, pero el esfuerzo físico es intenso.

            La primera localidad es Castrojeriz, una de las ciudades del Camino de Santiago por excelencia, punto de referencia con casi dos kilómetros de recorrido por su casco urbano que guía del peregrino a través de la Calle Real, en lo alto de su cerro está su castillo.
           
Parte trasera de la Iglesia de San Juan en Castrojeriz.
 
        Como voy en dirección contraria, en vez de hacer el recorrido por la calle Real voy paralelo a ella que no deja de perder el aire medieval de la ciudad.

Calaveras con sus tibias de la Iglesia de Santo Domingo.

Casillo de Castrojeriz en mi salida de la ciudad.

        Atravieso la localidad de Castrojeriz, saliendo por la Colegiata de Nª Sª del Manzano y cogiendo la carretera local BU-P-403, después de una recta de dos kilómetros en la siguiente curva aparece inmóvil las ruinas del Monasterio de San Antón, la misma carretera pasa por debajo de uno de sus arcos que nos deja en dentro del convento.

Carretera y arco del Monasterio de San Antón cerca de Castrojeriz.


            De visita obligada, el convento de San Antón fue un hospital de peregrinos muy importante para su época, las ruinas datan del siglo XIV, después de estar un buen rato visitando y contemplando las ruinas continúo el camino, es la una de la tarde.

            De nuevo en el camino abandonamos el asfalto para ir por un camino rural , a unos pocos metros a mano izquierda según mi camino, dominando el terreno se encuentra una torre que son las ruinas de un alto contrafuerte seguramente de una antigua iglesia, en silencio domina el terreno, desafiando los tiempos ahí se mantiene erguido indicando el camino.        

Una torre indica los restos de una iglesia o similar dirección Castrojeriz.
        
           A diez kilómetros de Castrojeriz llego a Hontanas, un pequeño pueblo del que guardo buenos recuerdos de mi primer Camino a Santiago, ya que fue mi parada en la segunda etapa de aquel entonces.

            Se accede por la misma carretera que he abandonado antes, en el camino se recorre la calle Real, qué diferente se ve todo haciendo el camino al revés, en el centro de la población se encuentra la Iglesia de la Inmaculada Concepción, aprovechando que veo la puerta abierta hago una parada para ver su interior.

Calle Real de Hontanas en la provincia de Burgos.

Iglesia de la Inmaculada Concepción.

            En el patio del pórtico de la Iglesia y dado que está a la sombra aprovecho el momento y la situación para reponer fuerzas, el día de ayer compré para dos días, así que saco la navaja y me hago el bocata bien provisto de relleno para aplacar el hambre.

        Es la una y media de la tarde y llevo recorridos unos treinta y seis kilómetros, parecen pocos kilómetros pero el camino hay que tomarlo con calma y tranquilidad para poder disfrutar de él.
        
Mis salida de Hontanas para el Camino será la entrada al pueblo.

            Una vez que he terminado de comer salgo de Hontanas con la sensación de despedirme de un lugar especial para mi, no pensaba que algún día regresara por estos parajes y en este momento estoy pasando por ellos, por que me invade una sana sensación de añoranza y nostalgia.

            Del ya nombrado anteriormente Castrojeriz hasta ahora la pendiente del camino no ha sido fuerte pero era constante, a partir de ahora se endurece un poco el camino para volver a coger la altitud de 930 metros, similar al alto de Mosterales, ahora el camino discurre por una meseta de diez kilómetros con un corto pero intenso descenso para, posteriormente, hacer el ascenso para volver a coger la altura por la que se transcurre por un buen camino de tierra, a los diez kilómetros se vuelve a descender a 827 metros donde se encuentra Hornillos del Camino.

Camino entre Hontanas y Hornillos del Camino.

          Sobre las dos y media llego a Hornillos del Camino, el calor es fuerte, de ahí su nombre, o eso creo, los peregrinos ya han desaparecido del camino, están todos ya refugiados del sol y del amarillento terreno que impregna, todavía más, el ambiente de la sensación sofocante de la acción del sol, en bici he de reconocer que no se nota tanto ya que el aire que se mueve cuando se avanza mitiga bastante bien esta la sensación de bochorno.

Camino de Hornillos a Rabé de las Calzadas con la cuesta de Matamulos.
        
        De esta última localidad a Rabé de las Calzadas me encuentro con la último ascenso de la etapa de hoy son tres kilómetros de ascenso sin abandonar el camino de tierra, llegando al alto que por algo se llamará, la Cuesta de Matamulos, ahora ya toca el esperado descenso para llegar a Rabé de las Calzadas y un poco más adelante se encuentra Tardajos, una localidad de unos 825 habitantes que se encuentra a  diez kilómetros de la ciudad de Burgos.

Iglesia de Santa Marina en Rabé de las Calzadas.

        Los escasos kilómetros que quedan para llegar a Burgos son de un falso llano, ya que el perfil que resta de la etapa es un suave y progresivo ascenso.

        La entrada a la capital burgalesa la realizo a las cuatro de la tarde, sigo la avenida por la que entro en línea recta y paralelo al río Arlanzón, intento seguir el carril bici, en algún momento se me pierde y voy por la parte asfaltada de la calle, hasta que vuelve a aparecer para retomar otra vez el carril.

Mi e-bike con el arco de Santa María en Burgos.

            A las cuatro y media de la tarde y después de setenta kilómetros paso por el puente de Santa María para cruzar el rio Arlanzón y por el arco de Santa María, entro a la plaza del rey San Fernando para saludar a la Catedral, hace un año en este mismo lugar estuvimos mi compañero Ricardo y yo para comenzar la ruta del Cid hacia Valencia.

Plaza y Catedral de Burgos,

        Una pequeña parada en la plaza para dejar constancia de mi estancia con un par de fotografías para seguir con la ruta hacia Cardeñuela de Riopico, a partir de ahora tengo especial interés en este tramo del recorrido, de Burgos al fin de la etapa, porque había visto un tramo alternativo paralelo al río Arlanzón que era más sugerente que el marcado como oficial del Camino de Santiago.

        Salgo de la plaza por el mismo lugar por el que entrado, cruzando de nuevo el puente de Santa María salvar el rio, pero lo vuelvo a cruzar en el siguiente puente a 100 metros por el puente de San pablo, aquí saludo a mi amigo El Cid y ahora si que sigo paralelo al rio hasta que llego al barrio de Ventilla a mi salida de Burgos.

Camino cerca del aeropuerto de Burgos.

      
        Cuando abandono la ciudad el camino sigue hasta la población de Castañares que está a pie de la carretera nacional N-120, al llegar se coge un desvío hacia la izquierda para rodar por caminos de zahorra, con el aeropuerto de Burgos a mi izquierda, por estos lugares me encuentro con un biker de la zona, no le quiero adelantar por lo que le tengo a vista bastante recorrido hasta que él se desvía a la derecha a Burgos y yo continúo por mi camino hasta que llego a un conjunto de unifamiliares para desviarme a la derecha y abandonando en camino de tierra, se coge la carretera BU-V-7011 para cruzar por un puente la autopista AP-1 y pasar em primer lugar por Orbaneja Riopico y a kilómetro y medio llegar al destino de hoy, Cardeñuela Riopico.

Ermita de la Inmaculada en Orbaneja Riopico.

        A las cinco y veinte llego al Albergue Santa Fe, aquí se encuentra la dueña del local, lo primero que me dijo fueron los horarios de la cena y la hora de salida del día siguiente por la mañana, la pega es que la hora de la cena no me cuadraba lo más mínimo, ya que era prontísimo para mí, algo así como hacia las siete de la tarde.

        Como todos los días al finalizar la ruta subo a la habitación y me organizo para el aseo personal, los trabajos de lavandería y para preparar toda la logística de carga de aparatos electrónicos para el día siguiente, así que una vez con todo realizado, me voy a dar una vuelta al pueblo.

Fachada del albergue Santa Fe en Cardeñuela Riopico.

           El pueblo no es muy grande por lo que la primera razón para dar una vuelta es buscar algún lugar para cenar, en mi caminar llegué al final del pueblo donde se encontraba una pizzería pero estaba cerrada, así que me dirigí de nuevo al centro del pueblo donde está el bar de la localidad, el bar en cuestión es el Bar La Parada, más tarde observé que también era el albergue municipal.

            En el bar no había más que uno o dos lugareños con su vaso de vino en la barra, el lugar no era muy grande, en su interior apenas dos o tres mesas, le pregunté al camarero si daban de cenar, me contestó afirmativamente y respecto la hora me comentó que no había ningún problema, así que quedé a las nueve de la tarde noche.

para finalizar el día un buen plato combinado.

            Di otra vuelta más por la población para luego volver al albergue a por algo de ropa de abrigo, es Burgos y se nota que la temperatura baja drásticamente, más tarde cené un buen plato de huevos con patatas fritas, que, cual fue mi sorpresa que al fondo hicieron su aparición tres trozos de morcilla, todo un lujo.

            Y así termina el día, una bajada de temperatura que no apetecía para nada seguir por las calles de la localidad, así que me fui al albergue donde me tomé un café calentito y subí a la habitación a comprobar si todo se iba cargando correctamente.
            
            En los últimos compases de la jornada me puse a editar el vídeo  y con el sueño llamando a la puerta, ya no quedaba más que descansar y dormir hasta el día siguiente.

            Y mañana última etapa, uf qué rápido se pasan los buenos ratos y rutas, así que a descansar que mañana toca el regreso a casa, pero antes hay que hacer la etapa.

Tríptico en el albergue.